Están consideradas por los especialistas como pequeñas joyas nutricionales. En concreto, son la proteína vegetal más completa y valiosa que existe. Las semillas de cannabis se merecen ocupar un espacio preferente en la de despensa de quienes se preocupan por llevar una dieta equilibrada y sana. Descubrimos, además, lo fácil que resulta incorporarlas a nuestra alimentación y desvelamos los mejores consejos para adquirirlas y conservarlas. Desde luego es imprescindible tener cuidado con adquirirlas de máxima calidad, como en el caso de las mejores semillas de marihuana online en Sensoryseeds, solo así hay garantía de que se aprovechan todos sus beneficios.
Las semillas de marihuana que se dedican a la alimentación son una especie muy concreta de planta de cannabis. Se caracterizan porque, entre su composición, no figura el THC o tetrahidrocannabinol, sustancia responsable de los efectos psicoactivos que se atribuyen a la marihuana usada con fines lúdicos. Esta diferencia es, precisamente, esencial porque permite comer semillas de marihuana con la más absoluta tranquilidad en cuanto a posibles efectos secundarios no deseados. Estas semillas no son alucinógenas, ni generan dependencia. Comer semillas de marihuana no te droga y, por el contrario, tiene excelentes efectos positivos en tu salud.
¿Qué son las semillas de marihuana?
Del tamaño de un grano de maíz y duras, así son las semillas de la planta de cannabis. En su interior, contienen unas pepitas suaves, de color verde claro o blanco, que son los verdaderos “corazones saludables” a los que nos referimos cuando hablamos de semillas de marihuana. Tan potentes a nivel nutricional que basta con ingerir un par de cucharadas de semillas de marihuana al día para proporcionar a nuestro organismo sustancias tan importantes como aminoácidos esenciales, omega 3 y 6 o minerales imprescindibles como hierro, calcio, sodio y potasio.
No son un producto que se haya descubierto recientemente, aunque para mayor seguridad, se han realizado numerosos estudios científicos recientes que corroboran estas excepcionales cualidades nutricionales. Lo cierto es que las semillas de marihuana llevan siglos incorporadas a la alimentación de los humanos. Interesantes no solo por su calidad como proteínas de origen vegetal, sino también por la proporción en la que aportan la suficiente cantidad de nutrientes tan necesarios como esos aminoácidos esenciales, grasas saludables, fibra o, incluso, vitaminas. Por cierto, las personas con problemas de asimilación de gluten pueden tomar semillas de marihuana con total tranquilidad, no hay riesgo de alergias o reacciones metabólicas.
Existen otras fórmulas para consumir este superalimento, como el aceite o el polvo elaborados a base de semillas de marihuana, pero no son tan efectivas. La concentración es mayor cuando se añaden estas deliciosas “pepitas” a nuestras recetas habituales. Sí, porque, además, son un alimento sabroso, que deja un suave toque similar al de las nueces en los platos a los que se añade. Y, combina con todo, como vamos a ver a continuación.
Secretos culinarios para añadir semillas de marihuana a tus platos
Cocinar con semillas de marihuana es tan fácil o tan sofisticado como tú decidas. Si tus gustos se decantan por una dieta fresca y ligera, no vas a tener ningún problema. Las semillas de marihuana son el punto perfecto para acompañar tus ensaladas, cremas de verdura, batidos o yogures. Si eres un incondicional de la pasta y los arroces, vas a seguir preparando tus recetas favoritas, eso sí, ahora enriquecidas a nivel nutricional. Un par de cucharadas de semillas de marihuana en tu salsa de pesto, carbonara o bolognesa y… ¡a disfrutar! La misma oportunidad de comer aún más sano la tienen quienes prefieren la gastronomía tradicional, sus guisos de legumbres o estofados son perfectos para incorporar un puñado de semillas de marihuana. Con pescados o carnes al horno, basta con espolvorearlas por encima, doradas y crujientes también resultan exquisitas y no pierden nada de su capacidad nutricional.
Finalmente, los partidarios de alternar la leche de vaca con distintas variantes vegetales (soja, almendra, avena, arroz) o, directamente, los intolerantes a la lactosa, pueden elaborar su propia leche de semillas de marihuana. Tam sencillo como mezclar en una proporción de 6 partes de agua por una cucharada de semillas. Batir e ir ajustando según nuestro gusto de cremosidad. Por el sabor no hay que preocuparse, es suave y con un gusto que recuerda al de las nueces.
¿Cómo comprarlas y almacenarlas?
Hemos visto lo sencillo que resulta incorporar las semillas de marihuana a cualquier tipo de dieta, igual de fácil que es adquirirlas. Existen tiendas convencionales especializadas en la venta de este producto, pero no todo el mundo tiene una cerca de su casa, por lo que el sistema más cómodo es hacerlo por internet, que llega a todos los rincones. Elijas una u otra modalidad, lo único imprescindible es asegurarse de hacerlo en un centro especializado y con todas las garantías.
Respecto a su almacenamiento, las semillas de marihuana de calidad vienen en un envase herméticamente cerrado y opaco, de forma que quedan protegidas de la luz del sol y de la humedad. Una vez abierto el paquete, conviene guardar las semillas en un recipiente estanco y almacenarlo en tu despensa o en un lugar donde se den buenas condiciones de temperatura. También puede guardarse en la nevera o, si quieres ampliar su vida útil sin correr riesgos de que se deteriore, te queda la opción de congelarlo. En este último caso, tienes que seguir las mismas indicaciones y cuidados que se recomiendan para congelar y descongelar cualquier vegetal.
Las semillas de marihuana son, como ha quedado comprobado, algo más que un complemento nutricional. Hay pocos alimentos que puedan exhibir un nivel nutricional equiparable. Son uno de esos alimentos únicos por la cantidad y calidad de sus aportaciones saludables. Si, encima, tienen un sabor agradable y admiten mil formas de cocinarse… ¿cómo resistirse a probarlas? Su precio es asequible a todo el mundo y por internet se adquieren con comodidad. Resumiendo todas estas ventajas es fácil entender que se estén convirtiendo en uno de esos imprescindibles en los hogares de cualquier país del mundo.
