La higiene alimentaria está concebida como una disciplina que se enfoca en garantizar que los alimentos mantengan sus cualidades y potencialidades como su textura, sabor, aroma, entre otros. Dicho de otra manera, estos deben ser seguros para la salud. De ahí la importancia que implica que una persona manipule adecuadamente los alimentos.
Obtener un certificado en manipulación de alimentos incide beneficiosamente en quienes se dedican a esta delicada actividad. Y es que las bacterias pueden llegar a multiplicarse sin ningún tipo de control y mucho más cuando las condiciones están dadas para ello. Muchas de ellas son realmente perjudiciales para el ser humano, pueden llegar a causar diarreas, vómitos, fiebres, intoxicaciones y, en casos más extremos, llegan a ser letales.
Todo lo anteriormente descrito, tiene incidencia debido a la incorrecta aplicación de normas esenciales, conjugando malos hábitos de higiene alimentaria por parte de las personas que conforman esa cadena de manipulación de alimentos. Es por eso, que el manipulador debe atender todos estos aspectos con especial cuidado, ya que la higiene personal de quien manipula los alimentos, no es suficiente, por muy buena que ésta sea.
Es necesario adecuar estas normativas a la actividad que desempeña y tenerlas en cuenta para que esta persona no se convierta en un foco de infección o intoxicación.
Adecuadas prácticas de higiene y manipulación de alimentos
Se deben tener en cuenta varios elementos esenciales para una correcta manipulación de alimentos:
- La salud de la persona. Si se encuentra enfermo, puede ser un agente de contagio de la enfermedad que padece para los consumidores de los alimentos que hayan sido manipulados por él .
- La higiene personal: Además de su higiene habitual, debe estar pendiente de otros detalles, como mantener las uñas limpias y cortas, lavarse permanentemente las manos con agua y jabón, con un correcto secado. La limpieza de su ropa es otro factor importante, así como evitar usar objetos personales durante su jornada, como anillos, relojes, pulseras u otros.
- Respetar las normas de higiene: Dependiendo de la actividad que éste desarrolle, debe adecuarse a cada normativa. Para esto se puede acudir a un curso gratuito en higiene alimentaria y de esta forma, realizar un trabajo totalmente optimizado, y de acuerdo con los parámetros establecidos.
Su indumentaria de trabajo debe usarse en el recinto de trabajo y no salir con ésta, ya que puede quedar expuesta a contaminaciones.
- Se debe usar gorro, tanto hombres como mujeres, para evitar caídas de cabellos o algún tipo de contaminación, al tocarlo o arreglarlo de manera involuntaria. La mascarilla también es importante usarla si se usa barba o bigote, aunque lo ideal sería rasurar ambos.
Si se tiene algún tipo de herida hay que tratarla y cubrirla adecuadamente con vendas, asegurando de esta manera que no haya ningún tipo de contacto con los alimentos.
- Utilizar guantes: deben estar en perfecto estado, sin roturas, y lavarse las manos antes de colocarlos, incluso lavarlas con éstos puestos cuando se manipulan distintos tipos de alimentos.
- No se debe comer, fumar o masticar chicle en el puesto de trabajo. Cuando se va al baño es imprescindible lavarse las manos. Hábitos como sonarse la nariz deben ser eliminados, o lavarse las manos cada vez que se proceda a este tipo de prácticas.
- Lavarse las manos no es cosa sencilla, para la manipulación de alimentos es necesario hacerlo de la forma correcta, la cual consiste en el lavado con agua caliente y un jabón bactericida, con cepillado de uñas y frotando cuidadosamente todos los dedos, y entre ellos. Secarse las manos también tiene su forma, con papel de un solo uso. Nunca debe hacerse con aire y hay que dejarlas bien secas.
Se debe tener cuidado con costumbres que pueden ser normales para otros, como silbar, toser, estornudar, tocar objetos que no están higienizados, o usar perfumería o cosméticos con olores fuertes.
Errores en la manipulación de alimentos
Para que no incurras en los errores más comunes relacionados con esta labor es importante que obtengas tu carnet como manipulador de alimentos en la Comunidad Valenciana. Es un proceso sencillo que puedes llevar a cabo para conocer y aplicar la normativa que se encuentra regulada por los organismos públicos de esta localidad.
En tal caso, debes saber que un manipulador de alimentos es el responsable de que el producto se mantenga en las mejores condiciones higiénicas, cada vez que pasa por sus manos. Sin embargo, existen algunos hábitos que por desconocimiento o costumbre, se practican y son errores comunes.
- No lavarse las manos antes de iniciar la manipulación de alimentos o no lavárselas de la forma incorrecta puede significar un riesgo de contaminación, porque nuestras manos portan bacterias que no mueren si sólo lavamos con agua. Por ello es indispensable lavarlas con jabón antibacterial.
- Uso inadecuado de los guantes: éste es uno de los errores más comunes. Aunque dan una sensación de pulcritud y seguridad, lo cierto es que si no se usan de la forma correcta pueden tener más riesgos que si las manos entrasen en contacto directo con los alimentos.
- No someter los alimentos crudos a adecuados procesos de desinfección. Esto puede llegar a causar graves enfermedades. Es sabido que las altas temperaturas eliminan microorganismos, pero hay alimentos que se consumen crudos, sobre todo en las ensaladas. Estos alimentos presentan una alta contaminación durante su proceso de cultivo y cosecha, por lo que es necesario establecer el debido procedimiento de desinfección con los productos que están indicados para ello.
- Consumir alimentos vencidos es una práctica frecuente, pero hay que saber que en éstos existen agentes que pueden causar alergias alimentarias y otras enfermedades
- Descongelar los alimentos a temperatura ambiente. Ésta es una costumbre habitual tanto en sitios de trabajo como en el hogar. Tengamos presente que una descongelación de este tipo puede favorecer la multiplicación de microorganismos. Lo más recomendable es no romper la cadena de frío y descongelar dentro del refrigerador. De esta forma, el alimento no estará expuesto a temperaturas que puedan ponerlo en peligro y mantendrá sus buenas características.
- No usar el tapabocas, el uso de accesorios, fragancias o esmaltes es un error muy común. Muchos manipuladores de alimentos restan importancia a este tipo de detalles y terminan poniendo en riesgo de contaminación tales productos.
En términos generales, estas normativas son sencillas de cumplir y son de gran importancia para preservar las características saludables de cualquier tipo de alimento.