La evolución del sector turístico en España, ha sido el resultado de las políticas gubernamentales en conjunción, con la inversión y responsabilidad social que ha tenido el sector privado; ya que lograron visualizar, que el apoyo y respeto mutuo entre ambos, genera indudables logros.
Cuando nos referimos al turismo como actividad terciaria que impulsa el crecimiento económico de una ciudad como Benidorm, tenemos que mencionar cuáles son los componentes y las condiciones ideales que garantizan el éxito y generan ingresos económicos a todas aquellas empresas que proveen algún tipo de servicio turístico o algún bien .
En primer lugar tendríamos que mencionar la industria hotelera. Benidorm, se ha consagrado como uno de los principales destinos turísticos del Reino de España. El sector hotelero, ha ejercido una gran influencia en los índices de crecimiento económico de la ciudad y de la provincia en general, ya que indudablemente activa positivamente el comportamiento de la afluencia de personas.
Existen consorcios hoteleros reconocidos a nivel mundial por su amplia trayectoria en la industria del turismo y la belleza de su arquitectura; estas obras arquitectónicas además de darle gran vistosidad y realce a la ciudad que los exhibe, representan todo un centro de atracción para diversas actividades que se pueden realizar en sus instalaciones.
Los mejores hoteles de Benidorm
Si tuviésemos que clasificar los mejores hoteles de Benidorm, en los primeros lugares debemos señalar al Meliá, Poseidón y el Gran Bali, dado sus sorprendentes cualidades que los convierten en referencia del turismo español.
En el caso del Meliá, encontramos que es un hotel que se destaca por la elegancia de su infraestructura y su estilo moderno, las vistas panorámicas paisajísticas, la sala y servicio de spa y las 2 espectaculares piscinas que se encuentran al aire libre.
Los principales atractivos del Poseidón, son su ubicación, los espléndidos rasgos arquitectónicos y los espectáculos nocturnos que ofrece a su clientela; su cercanía con playa de Levante y con la zona comercial de Benidorm le conceden una posición estratégica que los diferencia de los demás.
Si nos referimos al Gran Bali, ubicado en la Costa Blanca, sería absurdo no mencionar que es el hotel más alto de toda Europa, con un total de 776 habitaciones y 18 ascensores. Uno de los elementos más emblemáticos es que cuenta con varios salones para la realización de grandes eventos, destacando el salón Palacio de Cristal.
Estos son solo tres ejemplos para significar que cada hotel, de los cientos que existen en Benidorm, tiene su particularidad que lo diferencia de los demás. Pero, ¿sólo basta la belleza de la infraestructura para determinar que un hotel es lo suficientemente bueno?. Por supuesto que no.
La calidad del servicio hotelero se refleja en otros paralelos que se ofrecen en su interior, como cafeterías, lavandería, actividades deportivas, actividades que pudieran involucrar a toda la familia y, el excelente trato o atención del talento humano que allí labore, hacia los clientes.
En segundo lugar, el sector de alimentos y bebidas, debe ser tan variado y con la plena convicción de que en primer lugar se encuentra la gastronomía local y nacional. El servicio de restaurantes, debe corresponderse con las más altas exigencias de limpieza e higiene para la manipulación de los alimentos. Es aquí, donde la supervisión de las instituciones del estado es fundamental, además de la legislación correspondiente en esta materia.
El desarrollo de pequeñas y medianas empresas, dedicadas a la venta de alimentos y a la demostración de las artes culinarias de la localidad, de una otra manera, también contribuyen a la activación económica, a través del consumo.
Las condiciones de las vías públicas y las unidades de transporte, marítimo, terrestre y aéreo son determinantes para que el turismo se desarrolle de manera armónica y todos sus componentes puedan interrelacionarse efectivamente.
Igualmente, la infraestructura que generalmente es frecuentada para conocer la ciudad en sí, plazas, comercio, los balnearios públicos, deben estar sometidos a constante mantenimiento, a fin de evitar su deterioro y reflejar una buena imagen.,
Aquellas empresas que se dedican a proporcionar servicios de entretenimiento, actividades culturales y ocio, así como teatros, discotecas, conciertos, espectáculos, parques de atracciones y temáticos, también son fundamentales para incentivar el consumo del turista. Son muchas las pequeñas y medianas empresas dedicadas a prestar este tipo de servicio, que se benefician de la actividad turística y, por supuesto, del propio consumo local.
De manera que, todos estos componentes de la actividad turística tienen que funcionar articulándose en un perfecto engranaje, que permita que los elementos de la actividad económica produzcan grandes beneficios.
Las distorsiones en el desenvolvimiento de una actividad, afecta a las demás. Por ejemplo, puede ser que la prominente actividad hotelera de Benidorm, funcione a cabalidad: lujo y elegancia por doquier, excelentes habitaciones, confortables camas, hermosa piscina, entre otras; pero, si los servicios de entretenimiento no son lo suficientemente atractivos y tienden a causar aburrimiento, o son repetitivos, sin sustancia, se debe tener por seguro, que los turistas, tanto nacionales como internacionales, no querrán regresar.
Afortunadamente la ciudad de Benidorm, no se corresponde con este caso, ya que se cuenta con excelentes sitios como el parque zoológico, parque temáticos, divertidos sitios nocturnos, que querrás conocerlos todos. Además de actividades como, caminatas guiadas, excursiones, deportivas, que se complementan con todas las demás.
En lo que sí se debe ser bastante precavido es que las empresas grandes no terminen arropando a las pequeñas; la competencia podría generar esta otra distorsión y, a la final terminan perjudicados los más débiles.
Finalmente, es importante mencionar un elemento tan importante como los demás, cuando se trata de turismo y es, la comunidad. La población, la gente, está en el deber de dar lo mejor de sí para garantizar la hospitalidad a quienes visiten la ciudad. Las personas son quienes mejor representan la cultura y la educación, son su máximo reflejo y, por lo general, los turistas, también buscan apreciar este tipo de elemento intangible, pero con un gran significado para quienes aprecian el valor del ser humano.