Tomar vino es uno de los placeres que muchas personas disfrutan, ya sea para celebrar ocasiones especiales o por mero gusto. Pero existe una creencia de que ingerirlo puede hacer que engordes, lo que viene mal si harás dieta. Por ello, te contamos si esto es verdad o solo un mito.
Para aquellos que tienen un metabolismo lento y les encanta el vino, es un verdadero problema perder peso, pues ingerir esta bebida es un detonador para engordar rápidamente. Por ende, tienen que eliminarlo de su vida.
No obstante, también existe mucha desinformación involucrada en el vino, pues dependiendo del tipo de este el efecto será menor o en mayor escala hacia nuestro cuerpo, haciendo que engordes o no.
Para determinar si un alimento o bebida tiende a engordar, es necesario analizar la cantidad de calorías que posee. Y para responder a la pregunta sobre si el vino engorda o adelgaza, esto es lo que haremos, pues es un tema bastante interesante y profundo.
¿Cuál es el número de calorías del vino?
De acuerdo a estudios, se ha llegado a la estimación de que una copa de tamaño convencional con capacidad para 160 cc de vino, tiene entre 100 a 170 calorías. Aunque según el WCRF o Fondo Mundial para la Investigación del Cáncer, esta cifra asciende hasta las 177 calorías.
De este número que hemos hablado, la mayoría de calorías están presentes en el alcohol en sí, por lo que, para determinar las calorías del vino, se necesitará conocer el volumen y presencia de alcohol en este.
Sin embargo, se debe resaltar que, la cantidad de calorías presentes en el vino dependerá de si es un vino dulce, seco, tinto, blanco, rosado, espumoso, entre otros. En este sentido, dependerá de la fermentación del vino.
Relación de la fermentación y las calorías
La presencia de calorías en el vino va a depender estrictamente de los carbohidratos que son liberados en el proceso de fermentación. Lo más habitual es que las uvas que sean más dulces, van a ser susceptibles a la fermentación con la finalidad de crear vinos con un nivel mayor de graduación de alcohol.
Esto se traduce directamente en un mayor número de calorías en la bebida y, debido a que las bebidas que son fermentadas cuentan con una concentración mayor de carbohidratos, entonces la cantidad de calorías aumenta.
Tomar vino en dieta, ¿es bueno o malo?
Consumir alcohol en exceso es malo para nosotros por muchos motivos y uno de ellos es el alto contenido calórico presente en la bebida. No obstante, si ingieres vino de forma moderada o racional, entonces no hay riesgo alguno de engordar.
Si bien es cierto que, en promedio, un vaso de vino tinto cuenta con unas 150 calorías, y esto puede parecer mucho, este también es el nivel de concentración de calorías en dos manzanas, un aguacate, un plátano, un vaso de leche, media hamburguesa pequeña, entre otros ejemplos.
Además, es importante señalar que debido a la manera especial en la que el cuerpo humano procesa las calorías provenientes del vino, las convierte en energía sin grasas adicionales en el tejido adiposo. De hecho, ayuda a deshacerte de la que ya has acumulado.
Aunque el efecto negativo en este caso sería que el vino incrementa el apetito en algunas personas, lo que les hará sentir hambre y querer comer con mayor frecuencia, propiciando un aumento de peso.
Pero no debes pensar únicamente que el vino engorda, pues también se ha descubierto que en su estructura molecular se encuentra un compuesto especial que permite disminuir el peso y es el piceatannol. Este bloquea procesos celulares, impidiendo que células grasas se desarrollen.
¿Cómo tomar vino sin engordar?
Si disfrutas de esta bebida y no quieres eliminarla de tu vida, entonces te servirán nuestros consejos para que puedas tomarla sin tener temor a engordar.
Pero es importante señalar que esto no significa que por seguir estas recomendaciones no habrá probabilidad de que engordes, ya que esto dependerá en su mayoría del metabolismo de cada uno.
- En primer lugar, no tomes vino en exceso. Esto no solo evitará que embriagues, sino que engordes.
- Si tomas vino, es importante que controles las ganas de comer posteriormente.
- Algo de actividad física con la energía obtenida por el vino también es de mucha ayuda.
- Disminuye la frecuencia con la que tomas vino.
Siguiendo estos consejos o recomendaciones, podrás disminuir un poco la probabilidad de engordar al tomar vino. Aunque si no quieres correr el riesgo, entonces tendrías que eliminarlo de tu vida.